• El fenómeno de «La Gran Renuncia», surgido en Estados Unidos, ha llegado a nuestro país
• Las dimisiones voluntarias de trabajadores indefinidos han crecido un 153% interanual en el mes de septiembre
«La Gran Renuncia» se originó en Estados Unidos y se ha extendido por otros países, como España. El término hace referencia al fenómeno social mediante el cual, en Estados Unidos, se empezó a detectar un éxodo laboral masivo en empleados de todas las industrias y de diferentes profesiones. En España, según los datos de septiembre, las dimisiones voluntarias de trabajadores indefinidos han crecido un 153% interanual. Y los estudios y cálculos realizados indican que la tendencia seguirá al alza.
En el caso español, la mayoría de las dimisiones durante la Gran Renuncia española se están produciendo en los sectores peor pagados, como la hostelería. Estos trabajadores que renuncian lo hacen para encontrar nuevas oportunidades laborales que los satisfagan.
"Grande Démission" ou "Grande Restructuration", la difficulté à faire correspondre l'offre et la demande de main-d'œuvre est un problème croissant ces dernières années, même si de nombreux secteurs n'en ont pas pleinement pris conscience jusqu'à la pandémie.
Con la voluntad de mejorar profesional y económicamente, muchos de estos empleados se plantean una nueva etapa laboral explorando el emprendimiento. Se plantea como un reto con grandes oportunidades, aunque supone un riesgo a valorar en un entorno económico incierto como el actual.
Otro dato muy destacable es que el 40% de las dimisiones se llevan a cabo por empleados de entre 25 y 35 años, que no solo buscan salarios dignos. La renuncia en este segmento supone un problema añadido: la fuga de talento joven.
De hecho, y de cara al 2023, la retención del talento se ha convertido en todo un reto y una preocupación en el mercado laboral. Y para ello habrá que implantar medidas que logren la satisfacción, no solo salarial, de los trabajadores que aportan valor.
Un ejemplo claro es la semana laboral de cuatro días. Tanto para la conciliación como para poder disponer de más tiempo libre, esta distribución de la jornada semanal podría implicar un estímulo para el trabajador, sin renunciar a la productividad que interesa a la empresa.
Otro ejemplo que está proliferando en las organizaciones son las aportaciones conjuntas en planes de pensiones. Esta contribución por parte de la empresa es un buen incentivo para mejorar la productividad y la felicidad de la plantilla.
Necesitaremos algo más de tiempo para ver cómo evoluciona este fenómeno en el mercado laboral español, el cual se caracteriza últimamente por la combinación de un mayor envejecimiento de los trabajadores con una marcada tendencia a prescindir cada vez antes de ellos.